Este tema relacionado con los
"hijos de Dios" de Genesis 6 ha sido un tema de controversia para
toda la cristiandad a través de los siglos. No son pocos aquellos que,
influenciados por un escrito pseudografico conocido como el “Libro de Enoc”, un
libro extra- bíblico y no canónico, plantean que los hijos de Dios mencionados
en Génesis 6 eran ángeles caídos que se unieron con mujeres humanas, que dio
como resultados a los gigantes; según el mismo
[Libro de Enoc], la idea de mezclarse humanos y ángeles surgió de Shemihaza,
líder de los ángeles malvados que llevó a que 200 ángeles se acostaran con
mujeres de cuya unión nacieron gigantes de 450 pies de altura,[1]
es decir 137 metros, esto es totalmente imposible, aunque también según la
Biblia ortodoxa etíope que incluye el libro de Enoc pero es distinto al comúnmente
distribuido: Henok 2: 1–3 "y la descendencia de Set, que estaba en el
Monte Santo, los vio y los amó. Y se dijeron unos a otros: 'Ven, escojamos para
nosotros hijas de los hijos de Caín; tengamos hijos para nosotros.'" Este es
el punto de vista expresado en el canónico moderno para esta iglesia etíope. Pero respecto a este asunto por supuesto no debemos
dejarnos llevar por este tipo de escritos extrabíblicos, sino en un detallado
estudio de las Escrituras mismas. Veamos a que conclusión llegamos.
Para despejar la identidad de
estos hijos de Dios, debemos buscar otros versos en la santa palabra de Dios
que los mencionen.
A pesar de que Job llame a los
ángeles “hijos de Dios”, no es menos verdad destacar que la Biblia misma
llama en más versículos, a los justos, con este mismo título. Por ejemplo,
Salmos 82:6,7 llama a gobernantes justos como “hijos del Altísimo” y de los
injustos dice que “mueren como hombres”. Deuteronomio 14:1 identifica al pueblo
de Dios como “hijos de Jehová”. Oseas 1:10 indica que a los israelitas se les
llamara “hijos del Dios viviente”, también Mateo 5:9: "Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán
llamados hijos de Dios"; Juan 1:12: "Mas a todos los que le
recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos
de Dios" Romanos 8:14,16,19,21: "Porque todos los que son guiados por
el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios, El Espíritu mismo da testimonio a
nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios". Porque el anhelo ardiente
de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. porque
también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la
libertad gloriosa de los hijos de Dios. Y Romanos 9:8: Esto es: No los que son
hijos según la carne son los hijos de Dios, sino que los que son hijos según la
promesa son contados como descendientes. También Galatas 3:26: pues todos sois
hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; Filipenses 2:15: para que seáis
irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación
maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el
mundo; 1 Juan 3:1: Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados
hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. 1
Juan 3:2: Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que
hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a
él, porque le veremos tal como él es. 1 Juan 3:10: En esto se manifiestan los
hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que
no ama a su hermano, no es de Dios. 1 Juan 5:2: En esto conocemos que amamos a
los hijos de Dios, cuando amamos a Dios, y guardamos sus mandamientos. Todos
estos versículos son esenciales en el entendimiento de Génesis 6:1-4, ya que
atribuyen el título de “hijos de Dios” a seres humanos. Entonces ¿Por qué hay
un fuerte contraste entre los términos “hijos de Dios” y las “hijas de los
hombres”? ¿Por qué Moisés utiliza dos títulos diferentes si se refiere en ambos
casos a seres humanos? Este pasaje habla de la apostasía de los justos
descendientes de Set, por lo que resultaría inapropiado utilizar los mismos
términos para referirse a los justos y a los injustos. Algunos argumentan que
en esos tiempos, el término “hijos de Dios” era usado solo en referencia de
seres angélicos. Sin embargo, como hemos mostrado, la Biblia atribuye este
mismo término a seres humanos justos. Génesis 11:5 llama a los injustos “hijos
de los hombres”, lo que resulta de gran valor para interpretar quienes son las
hijas de los hombres. Los hijos de Dios y las hijas de los hombres ¿Dieron como
resultado gigantes?
“HABÍA GIGANTES (PASADO) en la tierra en aquellos días,
y TAMBIÉN DESPUÉS (POSTERIORMENTE) que se llegaron los
hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron
los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre.” (Génesis
6:4) (¿Captaron?, los gigantes no fueron el resultado de la unión, -como se
plantea en la cristiandad- estos ya estaban y estuvieron después de que los
hijos de Dios se llegaron a las hijas de los hombres.)
En este pasaje se relacionan
los nefilim con los "héroes o valientes". Los nefilim ya existían y
no hay por qué pensar que se originaron como resultado de los matrimonios
mencionados en el vers. 2.[2]
Además del relato que da la Biblia en Génesis, se ha sugerido que los mismos Nephilim son aludidos también en Ezequiel 32:27[3],
la palabra para traducir “héroes o valientes” es utilizada en Ezequiel.
Vemos que en estos pasajes, la
palabra utilizada para describir el resultado de la unión entre hijos de Dios e
hijas de hombres fue “gigante”. Sin embargo, el idioma hebreo utiliza la
palabra הַנְּפִלִ֞ים “nephilim”[4] de la cual no existe un
unánime consenso en cuanto a su significado.[5] Algunos sugieren que su
real traducción es “maravillas” y otros prefieren utilizar términos como
“hombres de renombre” o “poderosos hombres de antaño”. Aunque la traducción
correcta fuera “gigantes” esto no representa ninguna evidencia a favor de la
postura que sugiere que fueron resultados de relaciones entre ángeles y mujeres
humanas, por ejemplo, la Septuaginta (LXX) (años 200 a 50 A.C.), versión al
griego del antiguo testamento hebreo, traduce esta expresión como γίγαντες
(gigantes).[6]
Resultaría igualmente ilógico que proponer que Goliat y sus hermanos tenían por
padre a un ángel.
El diluvio en el
entendimiento de los “hijos de Dios”
Aquellos que creen que los
hijos de Dios son ángeles, indican que solo su postura responde el porqué Dios
decidieron borrar de la faz de la tierra a toda la humanidad y comenzar desde
cero. Argumentan que solo la unión entre ángeles y mujeres humanas podía ser
tan atroz, que representaría la única justificación por la cual Dios destruiría
al mundo. Sin embargo, el contexto nos lleva hacia otra conclusión. Abramos
nuestras Biblias en Génesis 6:3 y veamos quienes eran los verdaderos causantes
de la inmoralidad: “No contenderá mi Espíritu con el hombre…”
Ahora leamos Génesis 6:5: “Vio
Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra…”
Y Génesis 6:7: “Y dijo Jehová:
Borrare de la faz de la tierra al hombre que he creado…”
Como podemos ver, en el contexto
de Génesis 6 no existe la más mínima alusión a no humanos. Lo protagonistas de
este drama son solamente “hombres”.
Génesis 5 en la comprensión
de Génesis 6
Génesis 5 y Génesis 6 son una
narración enteramente unificada. Génesis 5 describe la genealogía de todos los
descendientes de Set hasta Noé. Después nos pasamos al capítulo 6 y nos damos
cuenta que solo quedo Noé de entre los justos. Surge entonces la pregunta obvia
¿Qué paso con todo el resto de los justos? La única respuesta satisfactoria es
que se unieron con los inicuos, y de hecho es lo que vemos en Génesis 6:1-4.
Resultaría inverosímil que Moisés no haya registrado lo que sucedió con los
justos descendientes de Set. Por tanto, para entender el contexto de Génesis 6,
es vital la narración de Génesis 5.
Conclusión:
La evidencia bíblica es lo
suficientemente explícita como para afirmar que Génesis 6 habla de una
apostasía de los descendientes de Set, como lo declara la escritura: Lucas
3:38: "hijo de Enós, hijo de Set, hijo de Adán, hijo de Dios",
a los que atribuye el título de “Hijos de Dios”. Aunque algunos eruditos de las
Escrituras han interpretado dichos pasajes como alusiones a “ángeles caídos”,
el contexto es sumamente claro. Es mas Cristo declaro esto en Mateo 22:30: "Porque
en la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento, sino serán como los
ángeles de Dios en el cielo", acá vemos que los ángeles no pueden ser los
protagonistas mencionados en Genesis 6, pues contradeciría a Cristo.
Fuentes y citas : La
interpretación adventista sobre los "Hijos de Dios" de Génesis 6
(defensaadventista.org)
[1] Gran Diccionario Enciclopédico de la biblia Alfonso
Ropero Berzosa p. 1300.
[2] LA
BIBLIA DE LAS AMÉRICAS – NOTAS Genesis 6:4.
[3] ver
Hendel, Ronald S. "Of Demigods and the Deluge: Toward an Interpretation of
Genesis 6:1–4". Journal of Biblical Literature, vol. 106, no. 1, 1987, p. 22.
[4] «Strong's Hebrew: 5303. נְפִילִים
(Nephilim) -- "giants," name of two peoples, one before the flood and
one after the flood». biblehub.com (en inglés). Consultado el 3 de mayo de
2020.
[5] Léxico
hebreo Brown Driver Briggs pag. 658; Fuertes H5307.
[6] «Septuagint Genesis, Ch. 6 - Part 1».
web.archive.org (en inglés). 24 de diciembre de 2013. Consultado
el 3 de mayo de 2020.
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