“EL Ladrón en la Cruz”.
Lucas 23:43
Un texto muy Usado es Lucas
23:43
Es importante mencionar que
el griego de la época no utilizaba "coma" así que el hecho de “agregar”
una coma donde no va es incorrecto y cambia su significado. La conjunción “que”
que se agrega por ejemplo en las Reina Valera 1960 no esta en los textos
griegos.
Veamos:
Entonces Jesús le dijo: De
cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.
Armonizando con el
versículo anterior a la respuesta del Ladrón:
Y dijo a Jesús: Acuérdate
de mí cuando vengas en tu reino. El ladrón le dijo cuándo "Vengas en tu
Reino"
Entonces Jesús le Dijo De
cierto te digo Hoy, estarás conmigo en el Paraíso.
Viéndolo Así el contexto
armoniza a lo dicho por el Ladrón.
Pero veamos el griego para
mayor luz:
(23:43) και→Y ειπεν→dijo αυτω→a él ο→el ιησους→Jesús αµην→(de
cierto)/(verdaderamente)/así
es/amén λεγω→digo/estoy diciendo σοι→a ti σηµερον→hoy µετ→Con εµου→de mí εση→estarás εν→en τω→el παραδεισω→parque-jardín[1]
“Y dijo a el Jesús de
cierto digo a ti hoy conmigo estarás en el paraíso”.
Esto cambia todo el sentido
de la frase y armoniza con todo lo que la biblia enseña.
Al Parecer el griego se
entiende Mejor y armoniza con el versículo anterior.
Si aceptamos la idea de que
alguien al morir va “al Cielo” estaríamos rompiendo el orden en que la biblia
enseña para la Resurrección:
20 Mas ahora Cristo
ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.
21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre,
también por un hombre la resurrección de los muertos.
22 Porque así como en Adán todos mueren, también en
Cristo todos serán vivificados.
23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo,
las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida. 1 corintios 15:20-23
[V.43->
De cierto. Ver com. Mat 5:18. Te digo que hoy[2]
estarás. Según el texto griego, Jesús literalmente dijo: am’n soi légō s’meron met’ emóu és’ en tō paradéisō; esto es: “De cierto te digo hoy conmigo estarás en
el paraíso”. El texto griego se escribió -según se acostumbraba entonces- sin
signos de puntuación, y la conjunción “que” es una añadidura que se ha hecho en
no pocas versiones, especialmente en castellano. Según el texto griego, el
adverbio “hoy” podría modificar tanto al verbo “digo” como al verbo “estarás”.
Por lo tanto, lo que necesitamos saber es si Jesús quiso decir “te digo hoy” u
“hoy estarás”. Y para poder saber cuál es la enseñanza correcta es necesario que
descubramos las respuestas de la Biblia a las siguientes preguntas: (1) ¿Qué es
el paraíso? (2) ¿Fue Jesús al paraíso el mismo día en que murió? (3) ¿Qué
enseñó Jesús acerca del momento cuando los seres humanos recibirán la
recompensa en el paraíso? La primera pregunta se responde en el comentario de
la palabra “paraíso”; la segunda y la tercera se contestan en el comentario a
la palabra “conmigo”. Conmigo. En la víspera de la traición -menos de 24 horas
antes de hacer esta promesa al ladrón- Jesús había dicho a los doce: “En la
casa de mi Padre muchas moradas hay;... voy, pues, a preparar lugar para
vosotros... Vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy,
vosotros también estéis” (ver com. Jn 14:1-3). Sin embargo, tres días más tarde,
Jesús le dijo a María: “Aún no he subido a mi Padre” (Jn 10:17). Es, pues,
evidente que Jesús ni fue al paraíso ni estuvo en el paraíso el día de su
crucifixión. Por lo tanto, el ladrón no podría haber estado con Jesús en el
paraíso. Paraíso. Gr. parádeisos, transliteración de la palabra persa
pairidaeza, “lugar cercado”, “parque”, donde había árboles y donde con
frecuencia se tenían animales para la caza. Estaba cercado de muros y algunas
veces había torres para los cazadores. La palabra hebrea equivalente, pardes,
tomada también del persa, se traduce como “bosque” (Neh 2:8) y “jardín” (Ecc
2:5). En la LXX, el jardín del Edén es el “paraíso” del Edén (ver com. Gen 2:8)
y la palabra parádeisos aparece comúnmente donde en español se emplea la
palabra “huerto” (Heb. gan). Ver Gen 3:1; Isa 51:3; Jne 2:3; etc. La palabra
parádeisos aparece en el NT sólo en Luc 23:43; 2Co 12:4; Ap 2:7. En 2Co 12:2-4
la palabra “paraíso” es evidentemente sinónimo de “cielo”. Que Pablo no se
refiera a un paraíso terrenal es muy claro, porque para él son una misma cosa
ser arrebatado al “cielo” y ser arrebatado al “paraíso”. Según Ap 2:7 el “árbol
de la vida” aparece “en medio del paraíso de Dios”, mientras que en Ap 21:1-3;
Ap 21:10; Ap 22:1-5 el árbol de la vida aparece junto con la tierra nueva, la
nueva Jerusalén, el río de la vida y el trono de Dios. No hay, pues, duda
alguna de que en el NT parádeisos es siempre sinónimo de “cielo”. Cuando Jesús
le aseguró al ladrón que tendría un lugar con él en el “paraíso”, estaba
refiriéndose a las “muchas moradas” de la casa de su Padre, y al momento cuando
se reuniría con los suyos (ver com. Jn 14:1-3). A través de todo su ministerio
Jesús había declarado específicamente que recompensaría “a cada uno conforme a
sus obras” cuando volviera “en la gloria de su Padre con sus ángeles” (ver com.
Mat 16:27). Y sólo en ese momento invitará a los salvados de la tierra a que
hereden el reino preparado para ellos “desde la fundación del mundo” (ver com.
Mat 25:31; Mat 25:34; cf. Ap 22:12). Pablo enseñó que los que duermen en Jesús
saldrán de 856 sus tumbas cuando Cristo venga por segunda vez (1Co 15:20-23), y
entonces recibirán la inmortalidad (Luc 23:51-55). Los justos resucitados y los
justos que estén vivos serán entonces arrebatados “para recibir al Señor en el
aire, y así” estarán “siempre con el Señor” (1Ts 4:16-17). El ladrón estará con
Jesús en el “paraíso”, pero será después de la resurrección de los justos, la
cual ocurrirá en la segunda venida del Señor. Ya se señaló que en el texto
griego de este pasaje no están ni la conjunción “que”, ni la coma, ni los dos
puntos que aparecen en no pocas versiones. Es evidente que tanto la conjunción
“que” como la coma o los dos puntos responden a lo que entienden los
traductores y revisores de la RVA, de la RVR y otras versiones acerca del
estado de los muertos. Ni Jesús ni los escritores del NT creían ni tampoco
enseñaban -ya lo hemos señalado- que los muertos van al paraíso inmediatamente
después de morir. Alterar este versículo añadiendo una conjunción o signos de
puntuación inexistentes en el texto original,* hace parecer que Jesús
contradice lo que él y varios escritores del NT dicen claramente de otros
pasajes. La promesa de Jesús al ladrón mientras ambos colgaban en sendas
cruces, fue -entendida dentro de las enseñanzas del NT- la siguiente: “Te digo
hoy: conmigo estarás en el paraíso” (ver com. Jn 4:35-36). El ladrón no se
preocupaba tanto por el momento cuando llegaría al paraíso, sino de que
realmente llegara allí. La sencilla declaración de Jesús le aseguró al
malhechor que, sin duda, estaría en el cielo, sin importar cuán falto de
méritos estuviera ni cuán imposible pareciera que Jesús -que estaba muriendo
como si hubiera sido un criminal- pudiera cumplir tal promesa. En verdad, la
presencia de Jesús en la cruz fue la que hizo posible tal esperanza. ]
No es posible que el Ladrón y Jesús estuvieran
ese mismo Dia en el paraíso y esto lo sabemos por qué el mismo los confirma
después de tres días:
Jesús le
dijo: No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; más ve a
mis hermanos, y diles: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro
Dios. Juan 20:17
y les
dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y
resucitase de los muertos al tercer día; Lucas 24:46
Varones
israelitas, oíd estas palabras: Jesús nazareno, varón aprobado por Dios entre
vosotros con las maravillas, prodigios y señales que Dios hizo entre vosotros
por medio de él, como vosotros mismos sabéis;
23 a éste, entregado por el determinado consejo y
anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos,
crucificándole;
24 al cual Dios levantó, sueltos los dolores de la
muerte, por cuanto era imposible que fuese retenido por ella.
25 Porque
David dice de él:
Veía al Señor siempre delante de mí;
Porque está a mi diestra, no seré conmovido.
26 Por
lo cual mi corazón se alegró, y se gozó mi lengua,
Y aun mi carne descansará en esperanza;
27 Porque
no dejarás mi alma en el Hades,
Ni permitirás que tu Santo vea corrupción. Hechos 2:24-27
Comparemos otra versión:
24.pero Dios lo
resucitó y lo desató de los dolores del Seol, porque era imposible que Él fuera
retenido en el Seol.
25. Porque David
dice respecto a Él: 'YO VEÍA ANTICIPADAMENTE A MI SEÑOR SIEMPRE, PORQUE ÉL ESTÁ
A MI DIESTRA PARA QUE YO NO SEA CONMOVIDO;
26. POR LO CUAL SE
DELEITA MI CORAZÓN Y MI GLORIA SE HA REGOCIJADO GRANDEMENTE, Y AÚN MI CUERPO
REPOSARÁ EN ESPERANZA,
27. PORQUE TÚ NO
DEJARÁS MI ALMA EN EL SEOL, NI PERMITIRÁS QUE TU SANTO VEA CORRUPCIÓN. Hechos
2:24-27[3]
[1] LogosKLogos:
Biblia interlineal español griego RV60 Tischendorf Lc 23:43 Luke 23:43
Interlinear: and Jesus said to him, 'Verily I say to thee, To-day with me thou
shalt be in the paradise.' (biblehub.com) (10) (PDF) Nuevo Testamento Interlineal Griego Español 1ª
Edición -Ministerio APOYO BÍBLICO - NUEVO TESTAMENTO Interlineal Griego
-Español | Julian Mendoza - Academia.edu
[2] Lucas 23-> Ver. 43
COMENTARIO BIBLICO ADVENTISTA.
[3] Biblia
Peshitta.
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